#agenciapyme – Kahai es la primera empresa en el mundo que industrializó el cacay, árbol de la amazonía muy frondoso que alcanza entre 15 y 20 mts de altura y que produce nueces de las que se extrae aceite de uso cosmético, antioxidante, con propiedades antienvejecimiento y capacidad de reducir arrugas, utilizado en la piel y el cabello.
Además de industrializar su cultivo, esta empresa trabaja ahora en el fortalecimiento de la cadena productiva de la nuez del cacay, como alternativa de desarrollo económico sostenible para Colombia. Se trata de un cultivo ideal para economía campesina, viable desde pequeñas extensiones, de fácil manejo y que se asocia bien con otros cultivos como cacao, plátano, arroz, maíz y forrajes.
Todas las partes del fruto se aprovechan: la cáscara se utiliza como alimento para ganado o como abono orgánico. El cuesco tiene alto poder calórico y es de combustión lenta, lo que lo hace un excelente combustible ecológico. La nuez, por su alto valor nutricional, gran tamaño e intenso sabor es considerada una “Súper Nuez”. Rica, además, en proteínas y minerales, entre las nueces es la de mayor contenido de omegas y fibra, y la menor en carbohidratos. Su consumo ayuda a bajar el colesterol, mejora el tránsito intestinal y es ideal para dietas.
Como complemento alimenticio ideal, se destaca que la harina sobrante después de extraer el aceite contiene un 40% de proteinas, además de minerales, omegas, fibra y todos los aminoácidos esenciales, siendo también más digestible que la harina de soya. Con esta harina se puede preparar leche de almendra, que sustituye la leche animal y es utilizada para el desarrollo de bebidas funcionales.
Por otra parte, se ha descubierto que es seco el aceite de esta nuez y que, por lo tanto, cuando se usa en el cabello y la piel se absorbe y estos no se ven grasosos. Ver características productos KAHAI
Los hermanos Camilo y Alberto Jaramillo, ingenieros industriales especializados en mercadeo, realizaron una monografía sobre el cacay y después en el 2008 en Alemania, con recursos propios, empezaron una investigación que les fue mostrando las posibilidades de este cultivo.
Uno de los problemas con que se encontraron luego en el país fue la disminución de árboles por la tala indiscriminada, pues la madera del cacay es muy apetecida para cocinar en las zonas húmedas de donde es oriundo. Por eso desarrollaron una tecnología para propagarlos en viveros y con ese fin recolectaron ejemplares silvestres en fincas y veredas.“Hemos desarrollado la tecnología para cultivar estos árboles, y a través de injertación hemos logrado reducir el periodo improductivo de 8 a 3 años, aumentando la productividad por hectárea en un 80%”.
Desarrollaron también la maquinaria para el procesamiento de nueces, aceite y harina, y buscan alcanzar “Cero Desperdicio” mediante el uso integral del fruto y sus derivados.
En este momento, se fueron a buscar fondos de inversión extranjera para las plantaciones. Y en Suiza lograron un patrocinio de 400 hectáreas, en Estados Unidos otras 400, más de 100 son de pequeños y medianos productores. Su meta es llegar a 5.000 hectáreas desarrollando proveedores a quienes les venden los árboles y la asistencia técnica.
Trabajan con entidades gubernamentales como Corpoamazonía y ONGs como The Amazon Conservation Team, con quienes adelantan en Caquetá y Putumayo proyectos con comunidades indígenas que tienen el cacay como alternativa de ingresos.
Como el cacay es un producto seco que se puede transportar a grandes distancias, lo están utilizando en diversos municipios de Colombia para programas de sustitución de cultivos ilícitos en el post conflicto. La cosecha silvestre genera ingresos a comunidades campesinas e indígenas en zonas de conflicto, convirtiéndose en una alternativa rentable para estas regiones, donde incluso están adelantan proyectos en Mitu, Vaupés.
Por ahora venden el aceite en Europa, Asia y Norteamérica. La comercialización de la harina y la nuez está en proyecto, pues todavía no cuentan con la cantidad de àrboles que les permita producir el volumen que necesitan. Precisamente por ello es que están reproduciendo árboles en vivero para generar plantaciones en diferentes lugares de la Amazonia y Orinoquía Colombiana.
Su trabajo ha sido reconocido en el país y fuera. Ganaron el premio Green Ingredient en Londres (2017). Se trata de un premio de sostenibilidad otorgado en una de las principales ferias de ingredientes cosméticos en el mundo, para incentivar empresas que desarrollen materias primas o ingredientes con un alto impacto social y ambiental.
También obtuvieron el Premio CBI de Innovación en Paris (2013), por su alto grado de innovación y marcado enfoque hacia la sostenibilidad. Fue escogido como “Mejor Trabajo de Investigación”, por el desarrollo del aceite como un ingrediente cosmético, en el congreso de Farma Cosmética en Cartagena, 2010. Y en el 2011 fueron ganadores del Concurso Ventures, que organiza la Revista Dinero y Mckinsey, como “Mejor Plan de Negocios” y “Mayor Potencial de Generación de Empleo”. También en el 2011 en el concurso de emprendimiento de SAB MIller ganaron el primer puesto entre más de 8.000 compañias de alto nivel. Y ese mismo año fue para ellos el premio de EPM a la Sostenibilidad.
http://www.kahai.co/
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